Esta noche hay gente que camina silenciosa. Hay hombres que quisieran estar alegres poder siquiera disfrutar de su cigarro. Hay muchachas que no salieron al baile y juegan con sus hermanos menores a la pieza oscura. Hay mujeres mayores que piensan en la sequedad de su entrepierna y hombres mayores que quisieran desprenderse de jorobas. Esta noche silenciosa pasa caminando mirando el suelo las veredas están llenas de espacios vacíos. Esta noche un gato se pasea por calles estrechas busca algo y no sabe qué. (C.Guerrero)




Experiencias, Diversión, Libertad....



Sólo para locos (Lobo Estepario, Herman Hess)



Cuando hube terminado de leer, se me ocurrió que algunas semanas antes había escrito 
una noche una poesía un tanto singular que también trataba del lobo estepario. 
Estuve buscándola en el torbellino de mi revuelta mesa de escritorio, la encontré y leí: 

Yo voy, lobo estepario, trotando 
por el mundo de nieve cubierto; 
del abedul sale un cuervo volando, 
y no cruzan ni liebres ni corzas el campo desierto. 

Me enamora una corza ligera, 
en el mundo no hay nada tan lindo y hermoso; 
con mis dientes y zarpas de fiera 
destrozara su cuerpo sabroso. 

Y volviera mi afán a mi amada, 
en sus muslos mordiendo la carne blanquísima 
y saciando mi sed en su sangre por mí derramada, 
para aullar luego solo en la noche tristísima. 


Una liebre bastara también a mi anhelo; 
dulce sabe su carne en la noche callada y oscura. 
¡Ay! ¿Por qué me abandona en letal desconsuelo 
de la vida la parte más noble y más pura? 

Vetas grises adquiere mi rabo peludo; 
voy perdiendo la vista, me atacan las fiebres; 
hace tiempo que ya estoy sin hogar y viudo 
y que troto y que sueno con corzas y liebres 

que mi triste destino me ahuyenta y espanta. 
Oigo al aire soplar en la noche de invierno, 
hundo en nieve mi ardiente garganta, 
y así voy llevando mi mísera alma al infierno